MENSAJE DEL DIA

Cuando uno tiene cualquier tipo de dificultad, tribulación, sufrimiento o dolor debe inmediatamente buscar apoyo en el salah.

El Mensajero de Allah (s.a.s) dijo: “Los corazones se oxidan igual que el hierro.” Los Compañeros le preguntaron: “¿Cuál es el remedio para eso, oh Mensajero de Allah?” “Recidad el Libro de Allah y recordadle mucho.” (Ali Al-Muttaki, II, 241)

Si alguien posee estas tres características, Allah le facilitará el acceso al Paraíso: gentileza hacia el débil, afecto hacia los padres y amabilidad para con los sirvientes. (Tirmizi, Qiyama, 49)

Mientras un hombre iba caminando, se sintió muy sediento. Vio un pozo, se acercó al mismo, y bebió un poco de agua. Luego regresó a su camino y vio un perro jadeando y comiendo de la suciedad. El hombre se dijo: «Este perro tiene tanta sed como yo tenía hace un rato». Entonces volvió al pozo, tomó un poco más de agua y llenó su zapato. Él llevó su zapato en la boca y dio de beber al perro. Allah fue magnánimo con él y le perdonó. (Bujari, Adab, 27; Muslim, Salam, 153)

La sinceridad es la condición prioritaria para cualquier tipo de adoración.

El corazón es el desarrollo y la razón debe aumentar el rango de conformidad con el corazón.

Profeta Muhammad (s.a.s) dijo: La persona que no respeta a los mayores y no es amable con los jóvenes no es de los nuestros.

El Noble Profeta educó al ignorante y al salvaje, transformando la crueldad en civilización, y la vileza en columnas de piedad y bondad, sustentadas en el amor y el temor por el Todopoderoso.

Si vosotros no cometieseis pecados, Allah os destruiría y os habría sustituido por otra gente que ha cometido pecados y luego ha pedido perdón de Allah, y Él les habría concedido el perdón. (Muslim, Tawba, 9; Tirmizi, Da’awat, 105)

La mejor casa entre los musulmanes es aquella en la que se trata bien a un huérfano. La peor casa entre los musulmanes es aquella en la que se trata a un huérfano mal. (Ibn Maya, Adab, 6)

El Mensajero de Allah (s.a.s) dijo en una ocasión: “Es verdaderamente inteligente quien no cede ante los caprichos y deseos del nafs, y quien se prepara para lo que viene después de la muerte.” (Tirmidi, Qiyamah, 25/2459)

Mientras aumenta la inteligencia de la persona, aumenta su humildad.

Allah el Omnipotente tiene piedad solo de aquellos que tienen piedad de los demás. Tened piedad de aquellos en la Tierra, de modo que aquellos en el Cielo tengan piedad con vosotros. (Tirmizi, Birr, 16; Abu Dawud, Adab, 66)

El Mensajero de Allah (s.a.s) dijo en una ocasión: “Es verdaderamente inteligente quien no cede ante los caprichos y deseos del nafs, y quien se prepara para lo que viene después de la muerte.” (Tirmidi, Qiyamah, 25/2459)

La fe es la luz del intelecto, el brillo de la consciencia y la armonía de las emociones del corazón.